MI NOVIO ESTÁ EMBARAZADO
Ellos son Diane Rodríguez y Fernando Machado, los protagonistas de un feliz embarazo transgénero
Los tres meses recientes han estado marcados por la felicidad para Diane Rodríguez y Fernando Machado. Los bochornos, vómitos y antojos característicos del embarazo han estado a la orden del día para ambos.
(FOTO: WLADIMIR ILICH TORRES ALVARADO )
Han transcurrido doce semanas desde que Fernando quedó embarazado de Diane. Es así, no viceversa. Diane, una mujer transfemenina —nació con una biología de hombre pero ha construido para sí un género femenino—, no lleva a su hijo o hija en el vientre, pero experimenta la gestación, afirma, con la misma intensidad que su esposo. El embarazo de Fernando, un hombre transmasculino —quien nació con una biología de mujer y decidió construirse un género masculino— ha impactado la vida cotidiana de esta pareja transgénero, donde cada uno defiende un género distinto al asignado también socialmente para desarrollar su vida e interactuar con otros en todos los ámbitos, desde el laboral y afectivo hasta el ejercicio de sus derechos a la salud, la educación o el entretenimiento, entre otros.
Se conocieron a través de las redes sociales hace un par de años y el encuentro desembocó en la decisión de compartir una vida en común una vez que Fernando, originario de Venezuela, mudó su residencia a Guayaquil, Ecuador, donde Diane nació y ya radicaba.
También en redes sociales la pareja dio a conocer la noticia de su embarazo:“Voy a ser mamá, mi novio Fernando Machado está embarazado de mí”, escribió en Twitter @DianeRodriguezZ. El impacto de la pequeña misiva pública corrió como pólvora en internet, primero en Ecuador, principalmente en el mundo del activismo y posteriormente a nivel internacional. Vino la lluvia de felicitaciones, muestras de apoyo y afecto. Aunque también la noticia despertó la polémica e incluso hubo “reclamos” en algunos portales de internet donde aparecían recriminaciones por “la irresponsabilidad de traer a un ser humano a sufrir a este mundo”.
Contra el prejuicio
Fernando Machado, activista al igual que Diane, tiene 22 años de edad. Se ha distinguido por llevar su vida como persona trans de manera abierta. Su familia le apoya y le ha acompañado en su proceso, tanto de transexualización como de embarazo. Al enterarse su madre, que vive en la capital venezolana, rompió en llanto junto a su hijo quien desde Ecuador le daba la noticia vía telefónica. A decir del futuro padre, su mamá le acompaña y ya teje las chambritas para su nieto o nieta.
En la escena pública, a Fernando se le ha visto en marchas en su país y ha luchando desde organizaciones civiles por los derechos de la comunidad LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgénero) de Venezuela, un país no muy abierto al tema. La decisión de cambiar su residencia, relata, responde a la conexión inmediata que tuvo con Diane a finales de 2013.
En tanto Diane, de 33 años de edad, cuenta con un historial amplio ya como activista destacada, con una historia personal marcada por la discriminación al interior de su familia y en el ámbito laboral. En su adolescencia salió de su casa debido a la homofobia de su padrastro. Deambuló un par de meses por las calles de Guayaquil en total desprotección. El regreso a la casa tuvo como condición “guardar la compostura”.
En su vida laboral, siempre tuvo problemas por su apariencia “afeminada”. Un suceso que detonó su activismo fue precisamente defenderse legalmente ante la violación de sus derechos laborales por la homofobia de sus jefes. No ganó, pero la experiencia de buscar solución a su situación la empoderó y le abrieron paso, luchando, sobreviviendo y tomando conciencia de su ser social, cuenta Diane. “Comencé a luchar por mis derechos y de los demás LGBT”.
A pesar de sus circunstancias de vida, Diane decidió destacar y poco a poco se involucró en el movimiento de las disidencias sexuales de su país. Algunos de los logros de esta activista transexual son, entre otros, una demanda al registro civil que no procesó su solicitud de cambio de nombre de femenino a masculino. Ella argumentó una violación a su derecho a la identidad de género, con lo que sentó un precedente. Los medios de comunicación también han sido alcanzados por el activismo contestatario y crítico de Rodríguez, pues en varios momentos han sido cuestionados públicamente por la ridiculización que hacen de la comunidad LGBT, principalmente en la televisión local. En lo político, luego de un cabildeo social intenso, un grupo de mujeres trans, activistas gays y lesbianas, lograron entablar una mesa de diálogo con el gobierno, en la que Diane tuvo un papel protagónico. El resultado fue un acuerdo que se ha materializado a partir de 2013 en políticas públicas a favor del sector de la diversidad sexual en Ecuador, como la aprobación de la Unión de Hecho que permite a parejas del mismo sexo unirse legalmente y acceder a algunos derechos.
(Photo: WLADIMIR ILICH TORRES ALVARADO )
Disculpa presidencial
El férreo activismo de Diane logró que el presidente Rafael Correa Delgado se disculpara públicamente por un desliz homofóbico que tuvo el 28 de julio de 2012 en su programa “La Sabatina”, en donde el mandatario se defendió del comentario de un lector del periódico El Comercio, quien llamó “marica” al presidente por no aclarar el rumor de que encabezaría la delegación ecuatoriana que participaría en los Juegos Olímpico de aquel año. Ante la provocación del lector, Correa Delgado respondió al aire:“¡Qué venga (Zenón Moreno, lector del periódico) para ver quién es el verdadero marica!”. Esa respuesta generó el descontento de las organizaciones civiles LGBT de Ecuador, que de inmediato formaron una Alianza, la cual lideró la Asociación Silueta X, logrando que el presidente CorreaDelgado ofreciera una disculpa pública en la que reconoció su falta de respeto hacia la comunidad LGBT: “Tal vez perdí la cabeza, me extralimité. Y dije ‘que venga este señor para decirme personalmente que soy badea, marica’. Básicamente era en el sentido de ver quién era el cobarde. Sin embargo, eso ha molestado, y con justa razón, a la comunidad LGBT del país. Han mandado, no me ha llegado a la Presidencia, pero sí han puesto en las redes, una carta de protesta, que a mí me dolió mucho… mi convicción como presidente es luchar contra la discriminación en todas su formas, peor aún si son discriminaciones por preferencia sexual”. Y en tono conciliatorio, el presidente ecuatoriano afirmó: “No puede haber esos rasgos en mí, de estigmatización de prejuicios contra la comunidad LGBT”.
Esa acción política del presidente, pero muy simbólica, ha puesto un sello distintivo del activismo social que representa Diane, quien en aquellos días cabildeó una respuesta del presidente, lo que le ha dado reconocimiento social, pues la posicionó como líder nata de los movimientos sociales de Ecuador. Eso la llevó a ser elegida como presidenta de la Federación LGBT de Ecuador, que agremia a más de 60 organizaciones civiles. Diane intentó contender para una diputación pero no lo logró, y ha sido amenazada en un par de ocasiones por su activismo en las instalaciones de la organización civil Silueta X, desde donde ha emprendido, junto con otras ONG, decenas de acciones a favor del colectivo lésbico, gay, bisexual y trans de Ecuador. Recién fue certificada como defensora de los derechos humanos en su país por la asociación internacional Front Line Defenders, un órgano consultor de Naciones Unidas que reconoce el trabajo de defensores en todo el mundo.
En entrevista con Domingo, Diane Rodríguez relata que el fuerte vínculo que hay entre Fernando y ella desde que se conocieron los llevó a tomar la decisión de embarazarse: “Era un deseo de ambos y al no existir nada que nos lo impidiera, tanto biológica como legalmente, decidimos hacerlo”.
Su técnica para el embarazo fue coital, pues la transexualización de ambos no ha sido quirúrgica, lo que les permitió concebir biológicamente, de ahí que Fernando pudo embarazarse de Diane sin ninguna complicación.
Diane y Fernando han decidido no conocer el sexo de su hijo o hija sino hasta el momento en que nazca. Lo que sí les tiene ocupados es buscar nombres poco convencionales, que no tengan raíz judeocristiana, y sí significados más apegados a la naturaleza o personajes de la historia que hayan aportado algo trascendental a la cultura contemporánea.
Lo personal es político
Sobre lo que significa socialmente su embarazo, la activista plantea que están ejerciendo el derecho humano de acceso a la maternidad y a la paternidad, independientemente de la identidad de género.
“Vivimos como hombre y mujer, tal como socialmente las personas nos ven, y así nos desenvolvemos. Yo soy una mujer transfemenina y Fernando un hombre transmasculino. El proceso para llegar a este entendimiento ha sido complejo en cada caso, y al estar consientes de ello, sabiendo que es un derecho, es que decidimos agregar un miembros más a nuestra familia”, dice Diane.
—¿Qué implicaciones sociales crees que detone su decisión?
Lo que nosotros queremos es romper mitos y prejuicios sociales con el tema de la transexualidad. Ya ha habido otros embarazos de personas transgénero en otros países por fertilización invitro o inseminación artificial. Yo respeto la decisión de cada quien para tener hijos o hijas, en nuestro caso no fue necesario recurrir a esas alternativas ya que tenemos la posibilidad de concebir biológicamente.
—En su caso ¿cuál ha sido la forma específica para que Fernando se embarazara?
Estamos concibiendo a un ser humano de manera natural, es decir, a través de una relación coital en la que yo, como mujer transfemenina, aporté el semen, y él, como hombre transmasculino, el óvulo, lo que ha permitido que Fernando pueda gestar a nuestro bebé o beba.
—Es decir, tuvieron una relación “heterosexual” para poder concebir, aunque la identidad de género de cada uno es diferente al sexo biológico de ambos…
Nosotros somos personas transexuales independientemente de que biológicamente podamos concebir. A mí como mujer transfemenina me gustan los hombres como Fernando, y a él, como hombre transmasculino, le gustan las mujeres como yo. Nos complementamos simplemente, y como resultado de ello tendremos un hijo o una hija.
—Están rompiendo, de hecho, con posturas feministas sobre temas de género…
Yo me considero una mujer transfeminista. Creo que el reconocimiento de la feminidad no pasa por la biología de nadie ni por su género. Además, el feminismo no es patrimonio de nadie. Mi novio es un hombre feminista y los dos rompemos con el estereotipo de género como personas transexuales.
—De alguna manera, su embarazo tiene que ver con una postura política, ¿no?
Claro, para que exista un cambio social se requiere que las personas también cambiemos y que seamos congruentes entre lo que decimos y lo que hacemos. Lo que nosotros hacemos en lo individual, como pareja, desde luego tiene que ver con una postura política frente a la sociedad y las instituciones.
—En ese sentido, ¿su hijo o hija de alguna manera nacerá con una herencia política, de activismo?
¡De alguna manera! Nuestro hijo o hija, como bien dices, es resultado de la lucha del activismo que busca derechos que han sido negados por los prejuicios sociales, de ahí que hemos logrado avanzar en el reconocimiento de nuestras familias. En ese sentido, retomo la idea que planteas de que sí, “lo personal es político”. Mientras la lucha inicia como algo personal, tiene impacto social. Evidentemente pasa de ser algo íntimo, de dos, en su alcoba, a algo social, con impacto, no sólo en una persona, sino en una comunidad y hacia toda la sociedad en su conjunto. ¿Cómo ocultarlo? Nuestro hijo o hija tendrá que entender que viene de padres activistas y que será nuestra obligación social exponer nuestra situación para que haya una ruptura de prejuicios, y que cuando él o ella tenga que exponer públicamente que nació de padres transexuales, evidentemente esté preparado. Por eso Fernando y yo hemos decidido hacer público nuestro embarazo, para que la sociedad a la que llegue nuestro hijo o hija pueda estar más abierta, y que sepa que será un niño o niña como resultado de una lucha social.
— ¿Hay algún temor sobre lo que su hijo o hija enfrente en la sociedad por su origen de nacimiento?
Sí. Sabemos que probablemente él o ella va a sufrir discriminación indirecta debido a la visibilidad de nosotros como activistas transgénero, pero le vamos a preparar como cualquier padre o madre que protege a sus hijos.
—En materia de leyes, ¿cómo estará protegida tu familia una vez que nazca su hijo o hija?
Bueno, en Ecuador ya tenemos la Unión de Hecho, que nos da precisamente la posibilidad de acceder a derechos antes no reconocidos, pero ahora mismo estamos luchando porque nuestro país sea el primero del mundo que reconozca lo público y no lo privado. Es decir, que el Estado reconozca la identidad de género con la que las personas se reconocen públicamente, independientemente de su sexo biológico. Con ello se tendría que reconocer a las familias como la nuestra…
—¿Esta propuesta tiene repercusión sobre el tema legal en la decisión sobre el orden de los apellidos?
No. Para ello estamos haciendo otra propuesta en la que todas las parejas, heterosexuales, trans, gays y lésbicas, puedan elegir libremente el orden de los apellidos de sus familias, y esperamos que antes de que nazca nuestro bebé o beba, se apruebe. Será un beneficio también para las mujeres heterosexuales que siempre han estado en segundo término con respecto a los apellidos, y a algunas de ellas sí que les interesa.
—¿Qué les provoca saberse futuros padre y madre de un niño o niña?
Muchas cosas. Los primeros días hubo desconcierto, no de tristeza, sino de felicidad. Yo lloraba mucho y pensaba en que las cosas tienen que salir bien para no equivocarnos. Nosotros queremos que sea un niño o niña sana, muy feliz, que tome el camino que desee, que haga lo que quiera… que sea libre. En fin, que dentro de todas las esferas de su vida, tome las decisiones que quiera con su propio criterio. Nosotros le vamos a apoyar, siempre y cuando no se haga ni haga daño. ¡Y claro, jamás le vamos a tener un cuarto rosado o celeste, sino con todos los colores habidos y por haber!
(Photo: WLADIMIR ILICH TORRES ALVARADO )
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MY BOYFRIEND IS PREGNANT
They are Diane Rodriguez and Fernando Machado, the protagonists of a happy pregnancy transgender
The three recent months have been marked by happiness for Diane Rodriguez and Fernando Machado. Hot flashes, vomiting and characteristic pregnancy cravings have been on the agenda for both.
(Photo: WLADIMIR ILICH TORRES ALVARADO )
It’s been twelve weeks have passed since Fernando Diane was pregnant. Thus, not vice versa.
Diane, one woman transfemenina he was born with a man but biology has built for himself a feminine gender does not carry your child in the womb, but experiences the pregnancy, he says, with the same intensity as her husband. Fernando pregnancy a transmasculino man, who was born with a woman biology and decided to build a masculine gender has impacted the daily lives of this couple transgender, where everyone defends a different genre also socially assigned to develop their lives and interact with others in all areas, from the emotional to the labor and exercise of their rights to health, education and entertainment, among others.
They met through social networks a couple of years ago and the meeting led to the decision to share a life together after Fernando, originally from Venezuela, moved his residence to Guayaquil, Ecuador, where Diane was born and now lay.
Also in social networks the couple announced the news of her pregnancy: «I will be a mom, my boyfriend Fernando Machado is pregnant of me,» tweetedDianeRodriguezZ. The impact of small public letter spread like wildfire on the Internet, first in Ecuador, especially in the world of activism and then internationally. Down came the rain of congratulations, expressions of support and affection. Although the news also sparked controversy and there were even «claims» in some Internet portals which appeared recriminations over «irresponsible to bring a human being to suffer in this world.»
Against prejudice
Fernando Machado, activist like Diane, is 22 years old. He has distinguished himself by bringing his life as openly trans person. His family supports him and accompanied him in the process, both transexualización as pregnancy. On hearing her mother, who lives in Caracas, he broke into tears with his son who from Ecuador gave the news by telephone. To tell the expectant father, his mother accompanied him and weaves and chambritas for your grandchild.
In the public arena, Ferdinand was seen in demonstrations in his country and has been fighting for civil rights organizations in the not very open to the theme LGBT (Lesbian, Gay, Bisexual, Transgender) of Venezuela, a country. The decision to change his residence, reports, answers the immediate connection he had with Diane at the end of 2013.
As Diane, 33 years old, has a long history as a prominent activist and, with a personal history marked by discrimination within the family and in the workplace. In his teens he left home because his stepfather homophobia. He wandered a couple of months on the streets of Guayaquil totally unprotected. The return home was a condition «save face».
In his working life, he always had problems on their «effeminate» appearance. An event that sparked her activism was precisely legally defend against the violation of labor rights by the homophobia of their heads. He did not win, but the experience of seeking solution to their situation and empowered way for him, struggling, surviving and becoming aware of his social being, Diane account. «I began to fight for my rights and other LGBT».
Despite their circumstances, Diane decided to highlight and gradually became involved in the movement of sexual dissidence in his country. Some of the achievements of this transgender activist are, among others, a claim to the civil registration did not process his request to change the name of female to male. She alleged a violation of their right to gender identity, which set a precedent. The media also have been achieved by the rebellious and critical Rodriguez activism, because at various times have been publicly questioned by the ridicule that makes the LGBT community, mainly on local television. Politically, after an intense social lobbying, a group of trans women, gay and lesbian activists, managed to establish a dialogue with the government, in which Diane had a starring role. The result was an agreement that has materialized since 2013 in public policies in favor of sexual diversity in Ecuador, such as approval of de facto union that allows same-sex couples legally binding rights and access some sector.
Presidential Apology
The iron activism Diane got President Rafael Correa publicly apologize for homophobic slip that had the July 28, 2012 in his program «the Saturday» where the president defended the comment from a reader of the newspaper El Comercio , whom he called «fag» the president for not clarifying the rumor that lead the Ecuadorian delegation to participate in the Olympic Games that year. Reader under provocation, Correa said the air: «What (Zeno Moreno, newspaper reader) come to see who the real fag». That answer caused dissatisfaction on the LGBT civic organizations in Ecuador, which immediately formed an alliance, which led the Silhouette X Association, making the president CorreaDelgado offered a public apology in which he acknowledged his lack of respect for the LGBT community: «Maybe I lost my head, I overreach. And I said, ‘this man come to me personally I’m badea, fag’. Basically it was in the sense of seeing who the coward. However, that has upset, and rightly so, to the LGBT community in the country. They have ordered has not arrived to the presidency, but they have put in networks, a letter of protest, which to me really hurt … my conviction as president is to combat discrimination in all its forms, worse if they are discriminatory sexual preference. » And conciliatory tone, the Ecuadorian president said: «There can be those traits in me, stigmatizing prejudices against the LGBT community.»
That policy of the president, but very symbolic action has been a hallmark of social activism that represents Diane, who in those days lobbied a response from the president, which has given social recognition, as he positioned himself as born leader of social movements from Ecuador. That led to her being elected president of the LGBT Federation of Ecuador, which unionizes more than 60 civil organizations. Diane tried to contend for a council but failed, and has been threatened on a couple of occasions for his activism in the civil organization facilities Silhouette X, whence has undertaken, together with other NGOs, dozens of actions in favor of the collective lesbian, gay, bisexual and trans Ecuador. Was recently certified as a defender of human rights in his country by the International Association Front Line Defenders, a consultant organ of the United Nations recognizes the work of defenders worldwide.
In an interview with Domingo, Diane Rodriguez relates that the strong link between Fernando and met her since led to the decision to become pregnant: «It was a desire of both and as there is nothing to prevent us, biological and legally, we decided to do it. «
His technique was coital pregnancy, because both transexualización has not been surgical, allowing them to conceive biologically, hence Fernando Diane was pregnant without any complications.
Diane and Fernando have decided not to learn the sex of their child until the moment it is born. What we do is look for them has occupied unconventional names, with no Judeo-Christian roots, and other meanings more close to nature or people in history who have contributed something transcendental to contemporary culture.
The personal is political
What it means socially pregnancy, the activist states that exercising the human right of access to maternity and paternity, regardless of gender identity.
«We live as man and wife, socially as people see us, and so we live. I am a woman and Fernando transfemenina one transmasculino man. The process to reach this understanding has been complex in each case, and to be aware of it, knowing that it is a right, we decided to add more to our family members, «says Diane.
What social implications I think detonate his decision?
What we want is to break myths and social prejudice with the subject of transsexuality. There have been other pregnancies transgender people in other countries for invitro fertilization or artificial insemination. I respect everyone’s decision to have sons or daughters, in our case it was not necessary to resort to such alternatives as we are able to conceive biologically.
In his case what was the specific way for Fernando became pregnant?
We are conceiving a human being naturally, that is, through a sexual relationship in which I, as transfemenina woman, Contribution semen, and he, as transmasculino man, the egg, allowing Fernando to gestate our baby or drink.
That is, they had a «heterosexual» relationship to conceive, although gender identity of each is different from the biological sex of both …
We are transsexuals whether biologically can conceive. A woman transfemenina me as I like men like Fernando, and he, as transmasculino man likes women like me. We complement simply, and as a result a son or daughter will have.
They’re breaking, in fact, with feminist positions on gender issues …
I consider myself a woman transfeminist. I think the recognition of femininity bypasses biology anyone or gender. Moreover, feminism does not belong to anyone. My boyfriend is a feminist man and the two break with gender stereotypes and transgender people.
-Somehow, her pregnancy has to do with a political stance, right?
Of course, for there to be a social change requires that people change and we are also consistent between what we say and what we do. What we do individually, as a couple, of course has to do with a political stance towards society and institutions.
‘In that sense, your son or daughter somehow born with a political legacy of activism?
Somehow! Our son or daughter, as you say, is the result of the struggle of activism seeking rights that have been denied by social prejudice, hence we have made progress in the recognition of our families. In that sense, I return to the idea that if you raise, «the personal is political.» As the fight starts it personally, it has social impact. Obviously it is going to be something intimate, two, in her bedroom, something social, impacting not only on a person, but a whole community and to society as a whole. How do I hide it? Our child will come to understand that parents and activists will be our social obligation to expose our situation there is a rupture of prejudices, and when he or she has to publicly expose born transsexual parents obviously ready. So Fernando and I have decided to make public our pregnancy, so that the society to which our child may be more open, and you know it will be a child as a result of a social struggle comes.
– Is there any fear about what your son or daughter in front in society by their origin of birth?
Yes. We know that he or she will probably suffer indirect discrimination because of the visibility of transgender activists us, but we are going to prepare like any father or mother protecting her children.
-In Terms of laws, how your family will be protected once your child is born?
Well, in Ecuador already it has de facto union, which gives us precisely the ability to access rights previously unrecognized, but now we are fighting for our country is the first in the world to recognize public and not private. That is, that the State recognizes gender identity with which publicly recognize people, regardless of their biological sex. This would have to recognize families like ours …
‘Are proposal has an impact on the legal issue in deciding the order of names?
No. This’re doing another proposal that all couples, heterosexual, trans, gay and lesbian, can freely choose the order of the surnames of their families, and we hope that before the birth of our baby or drink, is approved. It will be a benefit also for heterosexual women who have always been in second place with regard to the names, and some of them do they care.
What causes them knowing future father and mother of a child?
Many things. The first days were puzzled and not of sadness but of joy. I cried a lot and think that things have to go right to avoid mistakes. We want to be a healthy boy or girl, very happy, to take the way you want, do what you want … to be free. Anyway, in all spheres of your life, make the decisions you want with your own discretion. We will support, provided it is not done or do damage. And of course, we’ll never have a pink or blue room, but with all the colors have or might have!
(Photo: WLADIMIR ILICH TORRES ALVARADO )
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